Este martes el grupo chileno Valmar, de la familia Imschenetzky, anunció que acordó comprar al grupo canadiense Clairvest la totalidad de su participación en la cadena de casinos Marina del Sol (MDS), que opera las salas de juego de Talcahuano, Chillán, Calama y Osorno.
Clairvest, según su reporte anual del 2022, controlaba el 50% del casino en Talcahuano y el de Chillán, mientras que en Osorno y Calama tenía cerca del 74% del total de las acciones de cada uno de ellos. Sin embargo, por pacto de accionistas tenían derechos políticos equivalentes en todos los casinos.
Marina del Sol es el tercer actor más relevante en la industria de casinos, después de Dreams y Enjoy. En sus cuatro sedes en Chillán, Calama, Talcahuano y Osorno, el año pasado recibieron 1.133.000 de visitas, lo que equivale a cerca del 16% de los 7,1 millones de asistentes a los casinos en Chile, según cifras de la Superintendencia de Casinos y Juegos. En ingresos por brutos por juego, las cuatro operaciones sumaron US$ 98 millones, casi el 15% del total de la industria, que logró US$ 660 millones en 2023.
En el 2023 la cadena de casinos reportó ganancias de $ 8.840 millones en Talcahuano, de $ 2.040 millones en Osorno, y de $1.538 millones en Calama. En Chillán, en tanto, tuvo pérdidas por $ 305 millones.
La operación, que fue asesorada por Carey por Valmar, en Chile, y por el canadiense Torys, por Clairvest, quedó “sometida a ciertas condiciones suspensivas usuales para este tipo de operaciones, incluyendo las aprobaciones regulatorias aplicables, así como la obtención del financiamiento asociado a la compraventa, las cuales deberán cumplirse en un plazo no superior al 15 de noviembre de 2024″, detallaron en sus reportes las cuatro empresas a la Comisión para el Mercado Financiero. Las partes requieren la autorización de la Superintendencia de Casinos.
Además, junto con el fin de la alianza se cerrarán todos los litigios que los socios arrastran desde hace casi dos años, en los cuales se han enfrentado los estudios Carey y Clyde & Co., en Chile.
Una vez otorgada podrá cerrarse el acuerdo entre los socios, con lo que se cerrarán todos los litigios en curso.
Ambos socios mantienen una serie de disputas por diferencias sobre la administración de las empresas, las que derivaron en juicios arbitrales y denuncias penales. Las diferencias entre los socios derivaron en el despido de altos ejecutivos de la cadena, quienes iniciaron juicios laborales y develaron una investigación de la Fiscalía Nacional Económica por una presunta colusión en el mercado de casinos, indagación que involucra a Marina del Sol, Dreams y Enjoy y que llevó al allanamiento de los domicilios de los ejecutivos principales de las tres cadenas. msn